MAURICIO WIESENTHAL

“MI PATRIA ES EL SER HUMANO”

Mauricio Wiesenthal es un hijo de la Europa de postguerra. Nació en 1943 y ha dedicado su vida a conocer los caminos, las personas y las ideas de Europa. Habla como si corriera, casi sin aliento, y es un placer colocarse bajo la cascada de su pensamiento, un caudal de una enorme sabiduría que, de tanto en tanto, se atempera en remansos de humildad sinceridad. “Yo puedo estar equivocado”, reconoce después de exponer sus pensamientos.

Desde pequeño le acompaña la curiosidad de aprender y admite que si nunca ha dejado de hacerlo ha sido, en gran parte, porque ha tenido la habilidad de encontrar maestros por todas partes, la mayoría lejos del mundo académico. Recuerda, por ejemplo, con nostalgia, aquella troupe circense a la que un día se unió a orillas del Danubio. “En un circo se aprende un mundo”, admite sin titubeos.

Wiesenthal ha sido profesor de esgrima -con poco éxito-, actor de telenovelas, cantante en los cafés de la vieja Europa y autor de más de cien libros. Ha escrito guías de viaje, biografías, ensayos y narraciones. La editorial Acantilado publica ahora parte de lo mucho que ha escrito a lo largo de su vida sin encontrar editor. El derecho a disentir ha sido el último, una biografía cultural de Europa y de sí mismo, la memoria reconstruida de sus maestros, empezando por Stefan Zweig y terminando por un pescador anónimo que le enseñó a cobrar un pez sin que se enrocara.

Se presenta como un mestizo en una Europa de distancias cortas. No le gustan los nacionalismos. Reconoce que estaría en peligro en un país que no aceptara extranjeros. “Mi patria es el ser humano”, proclama después de decir que “la sangre solo sirve para hacer morcillas”. También reivindica una cultura que vaya más allá del racionalismo, que incorpore la sensibilidad del arte, la intuición y la fantasía.

Le preocupa la creciente intransigencia que se instala entre las personas y los pueblos de Europa. Le llevan a tiempos que creía superados. Por eso reivindica la tolerancia y el optimismo, la discrepancia con buen humor. Está convencido de que nos iría mucho mejor si fuéramos más simpáticos.

Xavier Mas de Xaxàs, 12/02/2022