MARTA ESTEVE

“LA CULTURA NOS HACE

GANAR MINUTOS DE VIDA”

A Marta Esteve le gusta la cultura, especialmente, la música. Dice que “la cultura es vida” y cuando sale de un buen concierto comenta con su compañero que “hoy hemos ganado minutos de vida”. Ganar vida en lugar de perderla y hacerlo gracias a la cultura es la misión que Marta Esteve se ha propuesto al frente de la Fundación Carulla.

Esteve considera que la cultura debería estar mucho más presente en las escuelas. Lamenta que, en muchos casos, esté relegada a las actividades extracurriculares porque considera que las personas que tienen una buena formación cultural gozan luego de muchas más oportunidades para vivir una vida plena. 

Por el contrario, aquellas personas que, como ella dice, “no han aprendido la cultura, porque la cultura se aprende” son más propensas a la marginalidad. De ahí la importancia de que la cultura arraigue entre los colectivos sociales más desfavorecidos.

La cultura, en todo caso, debe ser útil, hablar del día a día, interpelar a la gente. La cultura, asimismo, es importante porque cura y en estos tiempos de crisis pandémica y medioambiental es un buen remedio contra la depresión.

La cultura siempre ha sido transformadora de las sociedades que han sabido colocarla en el centro de sus prioridades. Esta centralidad, sin embargo, cada día es más difícil de conseguir. El problema radica en que gran parte de la cultura que consumimos no es sostenible. Puede ser espectacular, pero es de usar y tirar, no permanece, y, como dice Esteve, “solo transforma aquello que es sostenible en el tiempo”.